Hace tres años la tierra volvió a
cobrar vida y nos sorprendió a todos con una erupción volcánica submarina en la
zona de la reserva marina Mar de las Calmas, cuyo nombre en ese momento parecía
una broma pesada. Miles de imágenes salieron demostrado la fuerza del volcán y
como parecía que nada quedaba…
Pero no, pasado el tiempo la vida
ha vuelto a repoblar todo el espacio dejado teniendo el privilegio de ver un
proceso de recolonización en toda regla. Miles de especies de todos los grupos pueden
ser vistas en el Hierro, desde el esquivo Tamboril espinoso a las descaradas
morenas.
Incluso invertebrados como el
coral negro, asombran en esta isla por su presencia a menos de 30 metros,
siendo El Hierro de los pocos sitios en los que se puede disfrutar de esta
especie a esas profundidades.
Ejemplares de mantelinas, chuchos
y ratones pueden ser vistos en puntos situados a menos de 5 minutos del puerto
de la Restinga.
Coral Negro |
Tamboril espinoso |
Y el preciado Bajón, qué decir de la inmersión más especial cuyo descubrimiento se debe al afamado Jacques Costeau… Una inmersión que nos asombra con sus paredes verticales sin fin y los bancos de barracudas, pejeverdes, etc que adornan el mar abierto. Todo ello aderezado de los curiosos meros que no dejan de acompañarte durante toda la inmersión.
Nuestro guía Kike |
El hierro vuelve a ser un destino
paradisiaco con unas inmersiones de lujo. Desde aquí quiero agradecer a Pili,
Kike, Iñaki y Bea de Buceo La Restinga por todo lo que habéis hecho y el tiempo
dedicado, sin duda habéis conseguido hacer de esta isla un destino inolvidable.
Y como siempre os digo, una
imagen vale más que mil palabras, así que ahí os va una pequeña muestra de las
bellezas de esta isla.
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